FUENTE: Grup Antimilitarista Tortuga - Jueves, 19 de mayo de 2016
La petición fiscal se mantiene: una multa de 2.400 euros, cuyo impago puede tener como consecuencia el ingreso en prisión.
Como ya os hemos contado alguna que otra vez en esta página, en noviembre de 2011 el estado requirió la presencia de Adrián Vaíllo, miembro de Grup Antimilitarista Tortuga, en una mesa electoral en Elx. Este se negó a formar parte de ella por motivos éticos y políticos (declaró su objeción de conciencia al sistema electoral) y, entonces, comenzó contra él un proceso judicial que tiene, de momento, en el juicio de esta mañana su último capítulo. Ahora quedamos a la espera de la sentencia.
La cita de Adrián con la administración era a las 9:30 h, pero desde un rato antes había gente concentrada en las puertas de la Ciudad de la Justicia de Elx apoyando al objetor. Estas personas se han reunido tras una pancarta que tenía como lema «Por la Objeción al Sistema Electoral». Y se puede decir que este es un mensaje que expresa bien el parecer de los allí presentes: en unos casos porque se trata de gentes contrarias a un sistema político que consideran no democrático; en otros, porque reconocen el derecho de las personas a no actuar contra su conciencia.
Antes de las 10:30 h, ha salido Adrián del interior de los juzgados. Ha aprovechado para atender a los medios, para agradecer las muestras de apoyo y afecto y para reivindicar la justicia de una lucha que comparte con gentes de su zona y de muchos otros lugares.
Debemos recordar que procesos similares al del ilicitano ya los han vivido otras personas como Nuria Zurita o Héctor Beas y que aún queda algún otro caso abierto.
Sobre lo ocurrido dentro, Adrián ha comentado que ha podido expresarse con calma y libertad, però que la petición fiscal se mantiene: una multa de ocho meses a razón de 10 euros diarios, lo cual supone un total de 2.400 euros. Hay que saber que el impago de estas multas puede tener como consecuencia el ingreso en prisión.
Por último, varias de las personas presentes han compartido, un poco después, un agradable rato de convivencia.